Real de Catorce: Una Invitación a Explorar el Blues Mexicano
Real de Catorce, una banda emblemática de México, ha dejado una huella imborrable en la escena musical de habla hispana. Su líder, José Cruz Camargo Zurita, ha sido el corazón y el alma de esta banda desde sus inicios en la década de 1980. Conocido por su profunda pasión por el blues, José Cruz y su banda han creado una mezcla única de blues mexicano, rock, y poesía que ha conquistado los corazones de sus seguidores a lo largo de los años.
José Cruz Camargo, nacido en la Ciudad de México en 1955, desarrolló su amor por la música y la literatura desde una edad temprana. A los diez años, tomó su primera guitarra, y desde entonces, no ha dejado de explorar las profundidades de la creación musical. A pesar de la escasez de espacios para jóvenes músicos en la década de 1970, José Cruz continuó tocando en peñas y compartiendo sus composiciones con el mundo.
A medida que José Cruz creció, se encontró con la música de blues, un género que le cambió la vida. Durante un viaje a Austin, Texas, tuvo la oportunidad de tocar la armónica junto a algunos músicos locales de blues. Este encuentro lo inspiró a formar su propia banda de blues en español.
Al final de 1982 se juntó con Fernando Ábrego en la batería y el estadounidense Dwight Carroll en la guitarra para formar una banda de blues en español, en la que interpretaban sus composiciones. Tuvieron a Roberto González como bajista por un breve tiempo, hasta que, al comienzo de 1983, se integró Severo Viñas Montes. Por sugerencia de Roberto se pusieron el nombre de una mágica población de San Luis Potosí, que alguna vez fuera minera y que se encuentra enclavada en plena zona huichol, tierras de peyote ceremonial. Su primera presentación usando el nombre de Real de Catorce fue el 2 de abril de 1983, en una fiesta organizada para recaudar fondos para su amigo Manuel Ahumada, quien viajaría a Nueva York. Ahí tocaron también por primera vez Botellita de Jerez, La Broma Bolchevique y el maestro de ceremonias fue Jaime López. Existe un cartel que confirma esto.
A partir del V Festival de Blues en el Auditorio Nacional, en 1983, el grupo comenzó a acompañar a la cantante Betsy Pecanins, por lo que usaron el nombre de Blues y Fuerza del Centro durante el siguiente par de años. (Alain Derbez en su libro Hasta donde nos dé el tiempo), haciendo referencia a cierta fiesta en la que el famoso blusero estadounidense Papa John Creach cantaba acompañado por Taj Mahal en el piano, incorporándose José al palomazo.
Para 1985 Dwight salió del grupo, tomando su lugar el guitarrista José Iglesias. No fue sino hasta el 12 de diciembre de ese año, tras los terremotos en la Ciudad de México, que Real de Catorce se presentó en el recién inaugurado Rockotitlán, en búsqueda de un camino propio y alejados en la tutela de Betsy.
Real de Catorce comenzó su carrera tocando blues en español, un enfoque poco común en la escena musical de la época. Después de acompañar a la cantante Betsy Pecanins en el Festival de Blues en el Auditorio Nacional en 1983, la banda pasó a llamarse Blues y Fuerza del Centro. Esto marcó un período de transición en su carrera, donde exploraron un abanico de estilos musicales mientras mantenían su amor por el blues tradicional.
El año 1987 fue un hito en la historia de la banda, ya que lanzaron su primer álbum homónimo “Real de Catorce”, que incluía el icónico tema “Azul”. Esta canción se convirtió en un himno del rock mexicano y sigue siendo un clásico en la escena musical del país.
La banda continuó evolucionando a lo largo de los años, explorando nuevos géneros y fusionando elementos de blues, rock, y poesía en su música. A pesar de los cambios en la alineación de la banda, Real de Catorce nunca dejó de crear música innovadora y conmovedora.
El camino de Real de Catorce no ha estado exento de desafíos y obstáculos. José Cruz Camargo, el líder de la banda, enfrentó serios problemas de salud, incluyendo un diagnóstico de esclerosis múltiple. Sin embargo, su determinación y pasión por la música lo llevaron a superar estas dificultades y seguir creando música.
José Cruz y Real de Catorce han continuado produciendo música de alta calidad y actuando en vivo a pesar de los desafíos. En 2012, lanzaron el álbum “Nación Blues” con una nueva alineación de la banda, demostrando que su legado musical sigue vivo y fuerte.
Real de Catorce – Vive Latino 2013
El impacto de Real de Catorce en la música mexicana es innegable. Su habilidad para fusionar el blues con elementos de la cultura mexicana y su compromiso con la poesía y la autenticidad los ha convertido en una fuente de inspiración para músicos y amantes de la música en todo el país.
Hoy en día, invitamos a las nuevas generaciones a explorar la música de Real de Catorce y a descubrir la riqueza del blues mexicano. Además, esta historia nos recuerda la importancia de luchar por la pasión y la creatividad, a pesar de los desafíos que la vida pueda presentar.
Real de Catorce es un ejemplo de cómo la música puede ser una fuente de resiliencia y una expresión artística que trasciende las barreras físicas y emocionales. José Cruz y su banda nos muestran que la pasión por la música puede superar cualquier obstáculo y dejar una huella perdurable en la escena musical de un país.
Esperamos que esta invitación inspire a más personas a descubrir y apreciar la música de Real de Catorce y a apoyar a los artistas independientes que siguen sus pasos, luchando por mantener viva la creatividad y la autenticidad en la música mexicana.
Basado en información de: “60 años de rock mexicano” – Rafael González y Rock111.com